Almassora rememora sus orígenes con el reparto de arroz de Les Calderes
Almassora vive hoy su día grande de Santa Quitèria con el reparto de 7.280 raciones de arroz de Les Calderes, fiesta declarada de Interés Turístico Provincial. A partir de las 10 horas han comenzado los preparativos en el almacén municipal y la plaza de España para el cocinado y reparto de 52 calderas de arroz, de las que sólo 22 estarán a la vista del público, entre los asistentes a la jornada más importante de las fiestas patronales.
Vicente Arquimbau, ‘Charly’, capitanea un equipo que rememora los orígenes de Almassora, cuando el reparto de arroz se limitaba a vecinos sin recursos. La tradición se ha ampliado y hoy las colas para recoger una de estas raciones se sucederán desde media mañana mientras cocineros y ayudantes preparan cada una de las calderas, compuestas por: 14 kilos de arroz y 14 de pollo, 2’5 kilos de costilla, litro y medio de aceite, 2’5 kilos de guisantes, tres botes de tomate, ajos y sal.
El plato más popular de las fiestas de Almassora comenzará a servirse a las 14 horas en la plaza de España, después de que el párroco Juan Ángel Tapiador bendiga las calderas en presencia de la alcaldesa, Merche Galí, y la reina de las fiestas, María Portalés. Será el momento también de entregar la Caldera de Honor 2018 a la empresa Mosaicos Safont. Los hermanos David, Pilar y José recibirán la más alta distinción de la localidad por su trayectoria profesional.
Por su parte, la Junta de Damas de Santa Quitèria y Virgen del Rosario entregará a Manos Unidas y Cruz Roja Almassora la recaudación de la venta de cintas y pañuelos durante la romería a Santa Quitèria. El vicepresidente provincial de Cruz Roja, José Luis Tallón, recogerá el donativo. “La entrega de los donativos, como la del arroz de nuestras calderas, resume el carácter profundamente solidario de las fiestas de Almassora, un hecho que nos diferencia de otras localidades y hace más especial todavía el día de Santa Quitèria”, ha declarado la alcaldesa antes del inicio de la misa en honor a la patrona.
A la salida del oficio religioso la comitiva se desplazará hasta la calle Enrique Limo Escultor para asistir a la “mascletà” disparada por la pirotecnia Baldayo y visitará la Residencia Municipal de la Tercera Edad, donde los mayores recibirán su ración de arroz. También tendrán un servicio de reparto de especial enfermos y personas que no puedan asistir a la plaza de España. El centro social de San Felipe está habilitado hoy como punto de recogida para cerca de 800 vecinos con necesidades especiales.
La jornada en honor a Santa Quitèria finalizará con la procesión por la Vila presidida por el párroco de la iglesia de la Natividad, la reina y la corte de honor, así como la Junta de Damas de Santa Quitèria y autoridades. Al término del recorrido por las calles engalanadas tendrá lugar el disparo de una traca con fuegos de artificio una vez que la imagen de la patrona acceda al templo bajo una lluvia de pétalos de flores.