La Escola d’Estiu de Almassora abre en Santa Quitèria con todas las medidas de seguridad
La Escola d’Estiu de Almassora ha abierto sus puertas esta semana en el paraje de Santa Quitèria como espacio de conciliación laboral y familiar. Hasta 23 niños y niñas participan en la primera quincena de talleres organizados desde el Ayuntamiento con todas las medidas de seguridad para evitar contagios de COVID-19. El entorno natural y el albergue ubicado junto a la ermita son el núcleo escogido en esta ocasión, frente a los colegios, para cumplir la normativa sanitaria.
La alcaldesa de Almassora, Merche Galí, y la concejala de Educación, Raquel Barberà, se han desplazado esta mañana hasta el paraje para conocer el funcionamiento de la Escola d’Estiu, que este año se ha sometido a numerosas medidas de seguridad con el objetivo de garantizar la seguridad de alumnado y monitores. De esta forma, el aforo está reducido y los juegos tradicionales han dado paso a nuevas actividades para garantizar una mayor distancia entre participantes.
“Entendemos que es la fórmula más adecuada, al aire libre y con pocos inscritos, para cumplir la normativa sanitaria y, al mismo tiempo, dar una solución a todas esas familias que han regresado al trabajo y no disponen de alternativas para cuidar a sus hijos en el tiempo que están fuera de casa”, según ha indicado la concejala de Educación. La actividad se desarrolla durante un máximo de seis horas, de 8.00 a 14.00 horas, con dos monitores por grupo de estudiantes.
Los niños y niñas inscritos en la Escola d’Estiu se han encontrado con un paraje adecentado para la ocasión y con un albergue reabierto temporalmente por si necesitan hacer uso. De momento, las altas temperaturas y el sol de esta semana permiten a los participantes realizar las actividades al aire libre, junto al Millars y la ermita de Santa Quitèria. El coste por estudiante y quincena es de 70 euros, la misma tasa que el año pasado.
La escuela, que ha comenzado este lunes, se extenderá durante cuatro quincenas sin posibilidad de comedor para cumplir los requisitos que marca el protocolo de seguridad. La inscripción ha priorizado a los hijos e hijas de familias en las que trabajen ambos progenitores, así como a familias monoparentales, numerosas, educadoras o de acogida. El presupuesto que destina el Ayuntamiento de Almassora para llevar a cabo esta escuela de verano durante ocho semanas asciende a 37.212 euros.