Almassora acoge tres representaciones gratuitas como sede provincial de la VIII Mostra de Teatro Amateur de la Comunitat
Almassora apuesta de manera decidida por la cultura en todas sus disciplinas. La localidad vuelve a convertirse en la sede provincial del teatro amateur al acoger la VIII Mostra de la Federación de Teatro Amateur de la Comunitat Valenciana, cuyas funciones tendrán lugar los sábados 25 de octubre, 1 de noviembre y 8 de noviembre, a las 19.00 horas, en la Casa de la Cultura.
El concejal de Cultura, Vicente Blay Casino, y el representante de la entidad organizadora, Manuel Vivó, han desgranado las diferentes propuestas que podrán disfrutar los espectadores de manera totalmente gratuita. Además después de la representación habrá un debate con los actores y actrices para desgranar los aspectos más destacados del espectáculo y los mensajes que en la obra se lanzan.
“Almassora vuelve a ser epicentro del teatro provincial gracias a esta cita que reúne a compañías de toda la Comunitat Valenciana, ofreciendo al público propuestas diversas y de gran calidad artística”, ha afirmado Casino, quien ha remarcado que, desde el Ayuntamiento, se seguirán impulsando propuestas como estas que promueven el talento.
De este modo, Almassora se une a Elx (Alicante) y Benetússer (Valencia) y levantará el telón de la Casa de la Cultura para acoger tres obras teatrales de calidad. La primera compañía en subirse al escenario este sábado, 25 de octubre, será Carafur Teatro con su obra Agosto, que interpretarán una familia que se desmorona tras la desaparición del patriarca, un escritor alcohólico. La matriarca, enferma y cruel, domina a sus hijas, protagonistas de secretos, mentiras e infidelidades. Todas ellas incapaces de ser felices.
El 1 de noviembre será el turno de Las peladas (soledad de ausencia) de David Roldán, a cargo del grupo teatral Els Escalons. Una representación que cuenta la historia de Benito, un anciano que ha regresado a su tierra desde muy lejos con una linterna antigua, una pensión vitalicia y un secreto en el corazón que le atraviesa las entrañas.
Ahora vive en la habitación de una residencia de mayores y cada noche le visitan los viejos fantasmas de un pasado muy oscuro que se lo arrebató todo salvo la memoria y la voz silenciada de esas mujeres que fueron peladas de cabeza y cejas, obligadas a tomar aceite de ricino y paseadas desnudas por los pueblos y que aún reclaman, en susurros, lo que la guerra y la represión posterior les robó hace muchos años: la familia, la dignidad y en muchos casos, la vida.
La última de las funciones, Una nit al camerino de PoliNYAM Teatre, será el 8 de noviembre. Se trata de una obra, que ha sido galardonada en diferentes festivales, que promete a los espectadores diversión, sorpresas y mucho entretenimiento, gracias a una puesta en escena refrescante y atrevida.